El viento sacude a las plantas fragiles y deja crecer la as que saben vivir. El viento te hace pensar y te eleva, si sabes pasar por arriba de los compromisos y correr mas rapido de las costumbres aceptadas. No quiere ser tactico, no quiere especular ni perderse en estrategias infinitas. Caminar, por una vez, en la senda de los deseos, hacerlo manifiestos y no temer al rechazo. Abrirse y cerrar la puerta a lo acomodado porque la vida, quando es vida, te deja sorpresas, buenas o malas, al final del dia. Quien te quiere, lo sabes. Y te deja crecer...
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